jueves

Cuarto Capítulo, Anatomía, Procedimientos y Técnicas (II parte)

La anatomía del hombre.

El hombre en el descubrimiento y gozo del Punto G, no sólo es necesario, sino que es indispensable, su rol puede aparecer como disminuido o secundario pero a decir verdad, su función en este cometido va mucho más allá de ser un mero espectador.

En primer lugar el hombre debe aportar con el cambio de switch que permita enfrentar el encuentro sexual con una actitud de buscar y entregar placer y bajo ninguna circunstancia pretender descubrir el Punto G con sexo express o de descarga al “American Style”. En la medida que la comunicación entre la pareja se va potenciando, las palabras no son muy necesarias, por lo tanto, si la mujer siente o percibe que su macho ya no la está acompañando en esta aventura y hace rato que la tiene “corriendo sola”, terminará frustrada y desanimada.

En segundo lugar el hombre debe propiciar y facilitar el contacto de la zona erógena del Punto G, en este sentido la naturaleza una vez más actuó con sabiduría y si el hombre tiene medianamente claro donde “actuar” lo logrará sin problemas y por cierto, que para quienes no tengan mucha resistencia o no conserven el vigor juvenil de antes, las manos y en específico los dedos, cumplen perfectamente la función antes descrita y con los mismos resultados esperados.

En síntesis, los hombres no necesitan nada adicional ni extra naturaleza, sólo un cambio de actitud frente a la forma de sostener un encuentro sexual, lo demás ya está a nuestro alcance sólo hay que utilizarlo de la forma adecuada y en el momento propicio.

A cambio del “sacrificio” de bajar un poco las revoluciones y/o de modificar las conductas amatorias, podrán comenzar a sentir y a experimentar la gran satisfacción emocional de poder comprobar “con evidencias” como se han conducido con su pareja hacia los maravillosos caminos del amor Tántrico.-

Procedimientos Básicos y Técnicas.

Para las parejas que de común acuerdo quieran activar y disfrutar del Punto G, e iniciarse en el sexo Tántrico deberán en primer lugar identificar la ubicación exacta del Punto G, tal como se detalla en la figura, se debe explorar la pared frontal interior de la vagina a unos 2 cms. De la entrada vaginal, yo recomiendo hacer una palpación inicial de reconocimiento un día cualquiera, como una actividad inicial y quizas única, sólo con la finalidad que el hombre pueda reconocer el area y archivar en su memoria la textura de esa área y su entorno. Con suavidad y con los 5 sentidos puestos en sus dedos recorra el área antes descrita. Si lo ubica, palpará un área similar a una almendra, con una piel muy rugosa y el entorno podrá percibirse claramente como una cavidad corporal.

La importancia de esta recomendación es que con la palpación de reconocimiento, el hombre podrá hacer una comparación posterior que le ayudará a comprender la importancia y los cambios físicos que se producen al interior de la vagina.

Luego, será necesario que el hombre pueda realizar esta misma exploración pero en un momento de alta excitación sexual. En que momento y bajo que circunstancias queda a libre arbitrio de cada pareja, si se realiza una exploración en este momento se podrá percibir que el área que antes era una almendra habrá crecido y aumentado su rugosidad y el área circundante que antes aparecía como un cuerpo cavernoso ahora se ha convertido en paredes húmedas e hinchadas, además la estrechez y esponjosidad del interior de la vagina serán claramente perceptibles.

Muchas mujeres no conocen su cuerpo ni el funcionamiento y los ciclos de sus órganos, por lo tanto, la mayoría de los hombres actúan de mala forma, no sólo por ese instinto de “semental” que les aflora, sino que también por el desconocimiento propio o compartido del cuerpo femenino.

Autoeducarse, enseñar o adiestrar al hombre para que perciba “físicamente” estos cambios producidos por la pasión y el amor ayudará muchísimo a comprender y diferenciar un estado del otro (hasta al bruto más grande notará la diferencia). Como bien saben las mujeres, es a partir de este momento, es que activan todos los puntos sensitivos al interior de la vagina y es cuando, las mujeres que lo hayan logrado, se pueden incluso alcanzar múltiples orgasmos vaginales y por cierto, que si existe la voluntad para aquello, será más facil comenzar a disfrutar de Orgasmos de Punto G.

Cuarto Capítulo, Anatomía, Procedimientos y Técnicas (I parte)

Hace algun tiempo, el Dr. Árbol volvió a aparecer, ésta vez en su programa de radio respondió las inquietudes de algunas auditoras con relación a la existencia del ya repetido Punto G, la explicación del Dr. Árbol, una vez más fue de antología,…… “Esto es solo un mito –dijo-, No existe la comprobación científica de la existencia del Punto G y su relación con lo que se ha denominado Eyaculación Femenina y/o algún tipo de orgasmo distinto a los ya conocidos, se han disectado (Dividir en cientos de trozos un órgano) muchos tejidos vaginales para buscar la evidencia empírica de la existencia de algún tipo de órgano o glándula que pudiese tener relación con esto y ,sin embargo, la ciencia médica no ha podido encontrar nada”….. ¿¿¿¡¡¡!!!???

¿Cuántas mujeres se habrán quedado conformes con esta explicación?, ¿cuántas continuarán sintiéndose enfermas o sucias?, ¿cuántas tendrán dudas existenciales sobre la posibilidad de seguir adelante en esa sensación distinta que están experimentando?, ¿cuántos hombres, enamorados de sus parejas sentirán que ya no hay nada nuevo en esta relación y sin embargo finen la llave para abrir la puerta mágica del amor tántrico?.

Utilizando la misma argumentación del Dr. Árbol, podríamos pedirle entonces, que nos demostrara en cuantos pechos humanos disectados habrá podido encontrar el alma, lo más probable que en ninguno pero, para todos nosotros no es ningún misterio que la tenemos y justo en medio de nuestro pecho.

Terminar con esta ignorancia y mejorar la calidad de nuestras relaciones afectivas, es la principal razón que me mueve a llegar a esta etapa, en donde sin afán de dictar cátedra y clarificando que no soy una eminencia médica ni un adelantado en técnicas orientales, me permitiré compartir con todo aquel lo quiera las formas y métodos para potenciar su vida sexual utilizando lo que el divino creador nos dio, absolutamente nada más que eso.

Como habrán podido apreciar en los capítulos anteriores, me preocupé de dejar en claro que para alcanzar este grado sublime, en lo que a relaciones afectivas se refiere, debemos primero que todo, tener una relación y órganos sexualmente maduros, debemos poseer un muy buen nivel de comunicación, sumisión y entrega y, por último, debemos tener muy en claro que vamos en camino del gozo espiritual, por lo que será necesario aprender a conectar cuerpo y alma, así que, los ímpetus y las ganas deberán estar bajo control.-

Primero…..la anatomía de la diosa.

Estudios y documentos difundidos masivamente nos dan cuenta que la ubicación del Punto G es el centro de la pared frontal – interior de la vagina, en un área circular u ovalada, ubicada a unos 2 a 3 cms. de la entrada vaginal.

Como la diosa naturaleza es muy sabia y supo que estaba creando “animales concientes y gozadores”, dotó a la vagina de diversos puntos sensitivos y placenteros, para que las hembras de esta especie tuviesen un “gustillo agradable” como incentivo, al momento de reproducirse. La gran diferencia entre orgasmos clitorianos, vaginales y ahora de Punto G, está en que los dos primeros pueden ser alcanzados regularmente en una posición adecuada, por medios naturales o artificiales y por todas las mujeres que así lo deseen. Sin embargo, para llegar al Punto G es requisito básico que el nivel de excitación de la mujer sea altísimo y que sólo en ese momento se comience la estimulación del Punto G.

Para conseguir este estado de excitación cada uno tendrá su camino y le pondrá la música que quiera, pero, las caricias, besos, masajes en el cuerpo y/o en la zonas erógenas y los avatares propios de una relación sexual (con orgasmos “normales” mejor aún), son el conducto ideal para comenzar a palpar o sentir el Punto G.

Lo relevante a destacar, es que tenemos que mentalizarnos en modificar nuestra conducta sexual, ya que será necesario que nuestros encuentros íntimos se alarguen en duración. La paciencia y el control deberán prevalecer ya que no debemos apresurarnos a estimular el área del Punto G, cualquiera que sea la técnica que utilicemos (más adelante conoceremos varias), deberemos esperar el momento propicio para iniciar la estimulación de lo contrario el efecto obtenido será una pérdida del deseo en ella y esto se traducirá en frustración.

Aquí es donde nuevamente aparece el Tantra para confirmar esta afirmación, este libro escrito hace miles de años nos enseña que las parejas que logran este estado superior en materia de relaciones sexuales consiguen esto como una carga de sus potencialidades sexuales, llegar al Orgasmo de Punto G y a la Eyaculación femenina, equivale a la descarga de Amrita un elixir magico y divino, de inagotable fuente que al ser recibido por el hombre potencia sus capacidades sexuales” , en otras palabras, es un premio a la perseverancia, a la entrega y a la pasión, nadie puede pretender que en una escena tipica de sexo furtivo “a la americana” en un ascensor o detrás de una puerta, se pueda alcanzar este estado de supremacía sexual, ese sexo express, es claramente un sexo de “descarga” y es justamente la antitesis del amor Tántrico, por lo tanto a no confundir las cosas, si es necesario rectificar la conducta sexual, recomiendo hacerlo, no se trata de renunciar al sexo express, (que sus atractivos tiene, por supuesto) sino de diferenciarlo claramente del sexo Tántrico. (paciencia oriental le llaman).

Otra dato anatómico femenino importante, antes de irnos a la práctica, es que cualquier contracción de la pared abdominal, aleja totalmente la posibilidad de alcanzar un orgasmo de Punto G, cualquiera que sea la razón, (dolor, incomodidad, susto, intento de autoestimulación) la contracción del abdomen es el reflejo, para la sabia madre naturaleza, que la mujer no está en una situación de relajo total y como veremos más adelante, este factor es clave en el momento de la Eyaculación Femenina.

En conclusión, en la zona indicada, en el momento propicio con la atmósfera ideal, primer paso para llegar al Punto G.


Esto se está extendiendo demasiado, ……próximo capítulo la anatomía del Varón y primera técnica para al alcanzar el Punto G.